20 diciembre 2006

Sudestada.

Camino aspirando la sal
Entre una fina llovizna

Mis ojos se cierran
en defensa
Pero vuela en mi
la adrenalínica sensación
del alma.

He crecido en bahías
Pero la sudestada
Despierta en mi, intenciones,
Intenciones de vida
Y la comunicación enérgica
Del arrullo del mar
Silbidos de viento
Susurros de frío

He crecido y me renueva
El conocimiento
Del cosmos caos
En mis entrañas
Te escribo pensando en tu bahía
En la de mi hermano
En las del pasado

Aun la tengo en mi, secreteando
En mi ventana
Te espero en otra porque
Aparecerán, renovarán
y se irán
a otras playas

Por Rose

04 agosto 2006

Los poemas de Rose: Quizás

QUIZAS
Por Rose

He caminado en el verde húmedo
del mundo, caminado por encima de las nubes
maravillado en colores intensos
flores únicas, manos fuertes

he caminado por la cárcel cerrada
de la nieve
he sentido a la muerte
he amado intensamente

ahora se que no conozco
lo esencial de esta vida
lo que nos llevaría al Cielo
simplemente conocerte sincero
Humano,

Tu maravilloso ser de cúmulos
solo me has enseñado a callar
encerrar, o gritar
amando solo una parte
porque escondes en ti males
del universo,

¿Sabes? no creo más duele demasiado
el ser inocente, sensitivo
querer te, me ha llevado a mi muerte

quizás y sin quizás sea este
nuestro destino
terminar, .y terminarnos
sin entender tanta destrucción
fue bueno conocer
fue bueno sentir,
pero es más fuerte perder

Ojala pudiéramos darnos cuenta a tiempo
para darnos el lugar y dártelo
Ojala nos de tiempo.
Ojalá,
lo pienso

09 junio 2006

Antártico

** Antártico **

Me he preguntado, que es un antártico
en una tierra sin humanos
formados por y para otros
blanca, terca, solitaria.
donde viajan sólo
los especiales,
locos, mercenarios, aventureros...
en donde la mirada se aleja
el oído escucha y se detiene el tiempo..
donde las lenguas se mezclan
se prometen lazos lejanos
donde quedan las ganas y los miedos
donde se habla con Dios desde tu cuerpo..
Me he preguntado, qué es un antártico
y ese mi amigo eres tú.

Poema de Silvia Peruggia
marieperu78@hotmail.com

06 abril 2006

Los Poemas de Rose: Tengo frío

Tengo frío

Me he puesto al sol
y tiembla aún mi ombligo
no es el dolor del Polo Sur
ni falta de abrigo

Me he puesto al Sol y tengo frío
Pero mi Dios! quítame este frío!

Me balanceo Lentamente,
cual ritmo a corazón batiente
o en su jaula encerrado

se colorea entre mi mente y párpados
y se enlentece mi corazón,
se adormece la tristeza y dolor
Es claro me acunas con tu amor

Que difícil es formar
parte por dentro
de una lucha sin caminos
en la soledad mi amigo…
Me he puesto al Sol
y te he recordado,
solo tibieza encontré entre tus brazos
sin destino.

Rose

21 marzo 2006

Los Poemas de Rose: Regalos

Regalos

Recibí una lagrima de sal
por unos ojos grises
penetrándome en tibieza y dulzura.

Una mujer no llora, decía el abuelo
mientras me acercaba la gota a beber.

Efímero como tu regalo
al revolver el café, pertinaz
tu vuelta formó una perla fugaz
me la acercaste como pompa
la burbuja que en mis labios rompió
acercándonos a través de tí
a una mirada intensa... firme

Eran otros tiempos
y en el asombro intenso
frío, risas y silencio viví.

Mientras entre luces y estrellas
tú me llevaste al mundo cristalino de la nieve.
Repentino, tintineante
ese copo un instante duró,
cual niño con paloma herida.

De mi asombro partió un mirada,
una sonrisa..
desde allí compartí los segundos mas bellos
de recuerdos que tres hombres en mi vida vivieron-
intensos, efímeros, bellos, pasajeros...

Rose

06 febrero 2006

El país de las sombras largas al Sur

Los poemas antárticos de Rose

El país de las sombras largas al SUR

Fue uno de los inviernos más fríos.
Caminaba por el comienzo del silencio,
que se deslizaba a la costa.
Comenzaba a despertar y crujir el hielo.
El mar como burbujeante champagne
acompañaba el sonido quejumbroso de los lobos.

Como ANIAK, era fuerte, pero sensible.
Intensa y viva detrás senti,
el caminar lento de ERNENEK
marino de amplias manos y lentos pies
bigotes de lobo, por el camino crujiente.

Sentí sobre una tarima de hielo,
su sombra en la mía
y apoyó su cuerpo, envolviéndolo,
entre la piel de mi anorak de nylon y piel
en un abrazo de contorno helado.

Instantes eternos entre el despertar del hielo,
su aliento y el silencio
eran solo uno sin tiempo,
sin miedo.

Como la torcida separación de hielos,
salimos caminando hacia el fuego del hogar
y ahora una sensación intensa sin mover un cabello
en sumisión dual llegaba al fin del tiempo.-

Los esperaba un iglú,
un regalo único,
que solo ellos dos entenderían,
y que en ese país de las sombras largas
en el más crudo invierno
llevaría a esos dos niños a reunirse de nuevo,
sin roces con contemplación
sin miedos.

¡Oh! extraño conocimiento animal humano
que me llevó a vivir tan fuerte,
en esto que tu libro de cuatro meses
en hojas amarillas, llevabas para leer
y vivimos en una realidad natural para el recuerdo.
El país de las sombras largas unía hombre y mujer esquimal
y unió dos espíritus contrarios, por un instante y un lamento,

ROSE.

Mujer de río

Los poemas antárticos de Rose

Mujer de río
La Isla me dio la oportunidad de mi primer cuarto sola,
el conocimiento de amigos,
el confiar en el ser humano,
la Isla me dio dolor y miedo por primera vez,
pero me hizo fuerte
porque el fuerte es débil a su vez,

El iglú protege del frío
pero es frío
ni siquiera el color lo diferencia
pero como la vida misma
está presente

De Aniak a marinero mercante en un burdel
en puerto lobero
podría llamarse la historia
pero amor y odio van juntos
y fuerza tuve para alejarme
pero amigo: -ahora con los años,
palpita aún acelerado mi corazón,
porque soy mujer de río
nada más.-
Rose

El Burdel

Los poemas antárticos de Rose

El Burdel
pasaron las despedidas el vino
llego el Sur,
El Magallanes oculto,
todos juntos para demostrar hombría,

El burdel del puerto era oscuro,
rojos los trajes de mujeres, caro el alcohol.-
la música rodeada de humos,
con botas militares baile,
entre las asombradas miradas de camaradas
la prostituta me olió
y expresó: -¡qué olor a mujer!!
El jefe de grupo
golpeó su botella de cerveza a la mía
que levanté del piso.
y dijo: -Felicitaciones: ¡ganaste tú!

Oh tonto, no es un juego, es la vida,
la vida compartida que pasa
siempre e inexorable a tu lado
que pequeñez la envidia
el querer poseer todo
el creer ser lo mejor,
solo somos estamos quizás presentes
por el olor, el sentirse, acompañarse
respetarse.
Rose.

Una Noche

Los Poemas antárticos de Rose

Una Noche

Después de trabajar duramente.-
el baño con perfumes jabones, calmaba mis fríos
el agua que cae y desliza, en mí, suaviza penetra, adormece.

Velas de perfume llenaban de penumbra,
música rusa en un rincón y yoga sobre la cama.-

Se abrió a la sombra
una sonrisa ansiosa.
Sabía que seguiría con su daño
y a la vez, su dulzura.

Contento como un niño por haber conseguido
en mi un arreglo de asador, calor, olor,
....y recuerdos, que ayudé a construir
en la casa de todos.

Se acercó y en su cara había olor a grasa de vaca.
esa misma intensidad que olía de niña
en la cara de mi hermano,
cuando curaba la pelota de cuero,
Y olí en su sangre
cuando penetró su nariz
con la aguja que la cocía,

En su mano un cigarrillo, un vino, una palabra en francés.
Seria la última vez, sin dolor sin placer.
Estaba acordado.
sin embargo, gruñó la vida.

Una eyaculación de vino salió de su boca a la mía,
y entre perfumes y olores,
sin temores,
como una contorsión de gemidos
arañazos y mordidas,
combinamos el cansancio el placer el dolor
y el olor,

Quedan a veces en mi recuerdo los aromas y temperatura
que se mezclarán ahora
para siempre en mi vida.-

ROSE.-